La amenaza de deportación es real si usted es un inmigrante que no ha podido conseguir la documentación adecuada para permanecer en California o en cualquier otro lugar de los Estados Unidos. Los funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales pueden estar involucrados en la aprehensión, los procedimientos de deportación y otras cuestiones de inmigración que pueden conducir a su expulsión del país. En el Centro Jurídico de EE.UU.hemos respondido a las preguntas de muchos inmigrantes sobre la discreción del fiscal y cuándo se puede permitir a un inmigrante permanecer en Estados Unidos.
Según un memorando del DHS, determinadas categorías de inmigrantes indocumentados tienen mayor prioridad para la expulsión. Entre ellos se incluyen los que no reúnen los requisitos para acogerse a medidas de alivio como el asilo y han cometido delitos graves, múltiples o faltas graves, o que pueden constituir una amenaza para la seguridad nacional. Sin embargo, los funcionarios de inmigración tienen autoridad, o discreción fiscal, para evaluar las circunstancias de quienes no encajan en estas categorías, y pueden determinar que su detención o expulsión no es prioritaria. Esta decisión no cambia el estatus de la persona.
Un inmigrante indocumentado en Estados Unidos con problemas graves de salud, o con hijos u otros lazos familiares, puede no ser una prioridad para la expulsión. Los funcionarios del Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras, del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas o de otras agencias del DHS también pueden tomar esta decisión en el caso de alguien que esté implicado en un proceso judicial o que haya prestado servicio militar. El tiempo que un extranjero ha vivido en el país también puede ser un factor. Para más información sobre casos de deportación, visite nuestra página web.